Así como sucede con otros accesorios o prendas, para ponerse de manera adecuada las pelucas de pelo natural no solo es necesario practicar, sino también conocer algunos trucos que facilitan su colocación.
Si estás pensando en comprarte un postizo o ya tenés uno, pero nunca lo usaste, te contamos cuáles son los pasos que tenés que seguir para lograr que se ajuste firmemente a tu cabeza.
Antes de aprender cómo colocarte una peluca, es preciso que elijas aquella que mejor se adapta a tus necesidades.
Encontrar la peluca perfecta para vos, implica conocer los diferentes tipos de piezas de cabello natural disponibles en el mercado:
Ahora que ya sabés cómo elegir la mejor peluca de pelo natural para vos, llegó el momento de que te contemos en detalle cuáles son los pasos para colocarla.
Esta etapa variará en función de la cantidad de cabello que tengas. Si tenés el pelo muy largo, tendrás que recogerlo con una cola de caballo, o bien haciéndote trenzas, cruzándolas en la nuca y sujetándolas a la cabeza con pinzas.
Caso tengas pelo corto, lo mejor es que lo cepilles hacia atrás y lo sujetes con horquillas. Por otro lado, es conveniente que lo rocíes con laca para evitar que se suelten pequeños mechones o fibras capilares.
Ahora bien, si tenés muy poco pelo, o no tenés en absoluto, te recomendamos que uses un gorro. De esta forma, te sentirás más cómoda al usar la peluca y protegerás el cuero cabelludo, evitando irritaciones.
Si tenés el pelo largo o corto y en el paso anterior no te pusiste el gorro de la peluca, es momento de hacerlo.
La clave aquí es elegir un gorro que tenga una tonalidad similar al color de pelo de la peluca. ¿Por qué? Simple: si el postizo se resbala ligeramente, será difícil notar la diferencia entre uno y otro.
Para ponerte el gorro, sujetá la parte delantera por delante de tu cabeza y estiralo hacia atrás. Si algún mechón o cabello quedó por fuera, colocalo dentro para que no se vea.
Una vez puesto el gorro, llega el momento más esperado: la colocación de la peluca.
Lo primero que hay que tener en cuenta es su orientación. Identificá la parte trasera y la delantera, teniendo en cuenta que la etiqueta siempre está del lado posterior de la pieza.
Posicioná el postizo en una superficie plana de manera invertida, es decir, con la parte interior hacia arriba y la etiqueta en la zona superior.
Sujetá el postizo por las lengüetas de las orejas (ubicadas a los costados) y llevala hacia la parte superior de tu cabeza, inclinándola levemente hacia adelante.
Deslizá la peluca lentamente, comenzando por la línea frontal del cabello y avanzando hacia la parte posterior.
Luego, tenés que ajustar la peluca para lograr que quede firme. Tirá suavemente de las lengüetas hasta que la sientas cómoda. Tené en cuenta que las puntas deben alinearse entre sí y estar cerca de las orejas.
Por otro lado, asegurate que el frente de la peluca quede donde comienza la línea del cabello, a aproximadamente 3 o 4 dedos de distancia de las cejas.
Si vas a usar una peluca encaje frontal, es necesario que tomes precauciones para no dañar la sección delantera porque es especialmente delicada.
Para ponértela, posicioná la parte delantera por encima de tus cejas, evitando doblar o plegar el área de adelante. Por otro lado, al peinarla, tené cuidado de no estirar el monofilamento de encaje.
La colocación de las pelucas de pelo natural puede parecer engorrosa al principio, pero con práctica y dedicación, verás que la tarea se torna mucho más sencilla. Si tenés dudas o querés comprar tu próximo postizo, contactanos.